Las Personas según su Actitud (y 2)

Capitulo 3

Pasiva - Pasiva: malo, muy malo.

No se mueven (malo para la salud) y su mente tampoco. O sea, son borregos. Para que nos entendamos, están tumbados en el sofá viendo Gran Hermano, o el fútbol. Son "la masa" manejable y manipulable, que todo gran poder de intereses oscuros, necesita.

Pasiva - Dinámica: malo para ellos, un peligro para esos poderes que antes mencioné.

No se mueven, pero su cabeza bulle. Son conscientes de las injusticias, de que se podrían hacer mejor muchas cosas, de que valen mucho más de lo que sus jefes se merecen. Se sienten por eso impotentes, frustrados, atados. Y como físicamente no llevan a cabo ninguna actividad, no tienen forma de bajar esa tensión, no tienen ninguna válvula de escape. Son una olla a punto de explotar. Malo para ellos.

Y son un peligro para los malos de la peli, porque pretenden abrir los ojos a los otros. Para que nos entendamos, están sentados delante del ordenador metidos en Facebook (¿quién yoooo?). Escribiendo: ¡revolución, a las barricadas!. Agitando a las masas (locos insensatos).

Capitulo 4

Activa - Pasiva: maaal.

¿Qué pasa, eres muy vago para pensar, te da miedo, pasas de todo, no tienes valores, no tienes intereses? Vamos venga, hacer gimnasia está muy bien, pero ¿solo eres fachada, tan superficial eres? Cuando quieras darte cuenta tendrás muuuchos años ¿y? ¿pretendes ser un parásito, casarte con un rico, vivir con tus padres hasta que la muerte os separe?. Para que nos entendamos, o estás de botellón for ever, o tienes la vida resuelta.

Activa - Dinámica: el ideal.

Son personas equilibradas, mens sana in corpore sano. Son la gente guapa (pero la de verdad, no la de las revistuchas), aquellos famosos que se han convertido en ejemplo, en ídolos. Probablemente la abundancia, de la que nos predican en libros como El Secreto, esté ahí para ellos. No se sienten frustrados porque se mueven, caminan por el cambio. No se sienten impotentes porque se saben escuchados. Y no se sienten atados porque hace tiempo que aprendieron a valerse por si mismos y son, ahora, libres. Sus expectativas, sus deseos (grandes o pequeños) se ajustan a su realidad. Tienen lo que quieren y quieren lo que tienen.

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Esto es sólo una opinión personal. No pretende ser verdad.